Las fotografías capturan momentos preciosos de nuestra historia y patrimonio familiar. Sin embargo, con el paso del tiempo, estas imágenes pueden desvanecerse, decolorarse, ser atacadas por insectos, hongos o roedores. Por lo que, es importante tomar medidas preventivas para aplazar lo máximo posible su deterioro. En esta nota, compartiremos valiosos consejos que te ayudarán a cuidar y proteger tus fotos, para que puedan ser apreciadas y compartidas por las futuras generaciones.
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Manipulación: Al manipular fotografías, lo optimo es utilizar guantes de nitrilo, son los típicos guantes quirúrgicos, pero debes asegurarte que estos no sean de látex y digan guantes de nitrilo en la caja, ya que el látex contiene azufre, lo que en el largo plazo puede dañar tus fotografías. En caso de que no tengas, también puedes utilizar guantes de algodón sin pelusa, aunque estos pueden dejar restos de fibras en las fotos, por lo que no son lo óptimo. En peor de los casos, y no tienes ninguno de los anteriores, asegúrate de lavarte bien las manos y tenerlas libres de cualquier grasa o sustancia que pueda dañar tus fotos evitando tocar directamente la superficie impresa.
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Almacenamiento: Mantén tus fotografías en un ambiente fresco, seco, sin exposición solar directa y libre de humedad. Evita el almacenamiento en bodegas, entretechos o lugares sin aislamiento, expuestos a fluctuaciones de temperatura y humedad. Es recomendable utilizar cajas de plástico duras para guardar los álbumes y fotos, ya que impiden que estas se humedezcan o ingresen plagas. Y como medida adicional podrías un par de veces al año ir dejando las bolsas de sílica que absorben humedad (son las que vienen en tus cajas de zapatos nuevos).
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Protección contra la luz: La exposición prolongada a la luz solar y la iluminación intensa puede dañar las fotografías, causando decoloración y pérdida de contraste. Evita exhibir tus fotografías en áreas donde reciban luz directa del sol y opta por iluminación suave y difusa en su lugar.
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Evita elementos peligrosos: Mantén tus fotografías alejadas de materiales que puedan dañarlas. Evita el contacto con elementos corrosivos como pegamento, cinta adhesiva, grapas o clips metálicos, ya que estos pueden causar manchas, corrosión y deterioro a largo plazo. Además complejizan y pueden dañar los equipos utilizados cuando tú o una empresa especializada como Pixlab quiera digitalizarlas. En lugar de ello, utiliza adhesivos y sujetadores libres de ácido, como esquinas de montaje de papel o mangas de almacenamiento.
- Digitalización de respaldo: Considera digitalizar tus fotos como medida de precaución. La digitalización no solo te permitirá proteger tus imágenes originales de posibles daños, sino que también te facilitará compartirlas y preservarlas. Asegúrate de utilizar una resolución adecuada para conservar los detalles y la calidad de las imágenes.
Cada fotografía antigua es un vínculo con nuestro pasado, una ventana a momentos que de otra manera podrían haberse perdido. Preservar nuestras fotografías es preservar nuestra historia y conectar con nuestras raíces. Siguiendo estos consejos simples pero efectivos, puedes extender la longevidad de tus recuerdos y asegurarte de que perduren para las futuras generaciones.
¡No permitas que los recuerdos se desvanezcan! Cuida tus fotografías antiguas y dales la oportunidad de contar su historia una y otra vez.
